Podemos aprovechar las lluvias para abastecer de agua limpia. La ventaja del agua de lluvia es que es la mas limpia (destilada por el sol y las nubes, aunque no sirve de nada si hay demasiada contaminación en el aire, lo cual produciria una lluvia ácida), es potable si la filtramos.
Para guardarla, se necesitan cisternas y contenedores con suficiente capacidad. Se necesita una superficie impermeable, así como espacio debajo de ellas, se necesita que la cisterna este sellada para evitar que se llene de insectos y de sol, estos son los contenedores cerrados, las cisternas de ferrocemento pueden ser construidas por albañiles locales, es un contenedor grande de cemento y fierro.
Filtros para aguas pluviales: Si queremos cosechar agua de arroyos, ríos y cascadas, tenemos que poner especial atencion en un sistema de desasolve antes de que llegue a los estanques, presas o cisternas, ya que el agua estuvo en contacto con la tierra antes de llegar a los sistemas de captación.
Presas Filtrantes: Una solución muy sencilla para estos casos es la construcción de presas filtrantes en barrancos, cauces de arroyos y manantiales, que dejan pasar el agua, pero retienen tierra y materia orgánica.
Registro/Pileta de desasolvamiento: El agua se cosecha de los techos mediante canaletas y tubos, la guiamos hasta una pileta y desde ahi se cosecha el agua de la superficie para mandarla después a las cisternas.
Metodo Tradicional De Las Comunidades Rurales: El agua pasa por un cono de una piedra porosa. Estos pequeños poros y la expansion del aire durante este tiempo filtran el agua lentamente para su potabilización.
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